El Colegio de Arquitectos ha entregado la Medalla de Oro al arquitecto Rafael Moneo en un acto íntimo celebrado en la sede del COAC en Barcelona el 3 de abril. Con su máxima distinción, el Colegio reconoce la trayectoria de Rafael Moneo en el ámbito profesional y cultural, que lo ha convertido en figura de referencia en la arquitectura nacional e internacional del último medio siglo.
Rafael Moneo, nacido en Tudela en 1937, estudió en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid, donde se tituló en 1961. Su carrera, casi imposible de resumir, pivotará entre la construcción y la docencia, con incursiones en la divulgación de la arquitectura y unas conexiones importantes con el mundo del arte que le han llevado a colaborar habitualmente con varios artistas de primera línea.
En el ámbito profesional Moneo, autor de una obra extendida por medio mundo, destaca por proyectos que han cambiado la cara de las ciudades donde se han emplazado: Madrid, Toledo, Sevilla, Nueva York, Beirut, Berlín o Barcelona. Moneo es autor de una obra sensible con el patrimonio, tanto para preservarlo como para ponerlo en valor.
En el ámbito cultural Moneo ha diseñado importantes auditorios, salas de exposiciones y museos que le han permitido reflexionar sobre la cultura a nivel nacional, pero también ha proyectado a escala más pequeña, como una fundación o una galería de arte.
En el ámbito docente, Moneo impartió clases en la ETSAB desde 1971 a 1980, época en que formó buena parte del profesorado que llevó la institución a la cima de su prestigio. Autor de una buena colección de libros y conferencias destaca su última publicación, un pequeño libro editado por Acantilado sobre la vida de los edificios tan comprensible que puede servir e interesar tanto a los lectores arquitectos como a los que no lo son.
Su trayectoria ha sido premiada con casi todos los galardones más importantes que la profesión reconoce, incluyendo el Premio Pritzker en 1996.
Moneo ha estado buena parte de su carrera ligado al COAC, llegando a construir la sede de la Demarcación de Tarragona, un edificio ubicado en plena Tarraco romana, en un entorno muy delicado que ha pasado a formar parte de la vida cultural de la ciudad.
