Coincidiendo con el Día del Maestro, Saint-Gobain Ecophon vuelve a poner sobre la mesa un problema tantas veces normalizado como poco atendido: el ruido en los espacios educativos. La compañía, referente en soluciones acústicas sostenibles, advierte de que un mal acondicionamiento acústico repercute directamente tanto en la salud del docente como en el rendimiento académico del alumnado.
En España, los centros educativos no siempre están diseñados pensando en el confort sonoro. Materiales duros, espacios reverberantes y pasillos que actúan como cajas de resonancia generan un ambiente que exige a los profesores elevar la voz y luchar contra la fatiga vocal. Según diversos estudios, el 65% de los docentes padecen o padecerán disfonía o problemas de voz a lo largo de su trayectoria profesional.
Andrés Martínez, ingeniero acústico y concept developer de Ecophon en España, subraya en su artículo técnico que los alumnos de entre 6 y 12 años son los más afectados por el ruido debido a su limitada capacidad para discriminar estímulos auditivos irrelevantes. “El entorno acústico condiciona directamente la capacidad para comprender, recordar y participar en clase”, advierte el experto. 2 H₂
Impacto cognitivo del ruido en el aprendizaje
La evidencia científica es clara: los altos niveles de ruido o una mala relación señal–ruido dificultan la comprensión, la concentración y la memoria de trabajo. El impacto es especialmente notable en tareas que requieren precisión lingüística y procesamiento verbal, como lectura, escritura o expresión oral.
El ruido ambiente y la reverberación prolongada también inciden en la atención sostenida, un factor decisivo para el aprendizaje de contenidos complejos. Las matemáticas, por ejemplo, son una de las materias más sensibles al ruido: la resolución de problemas mejora significativamente en entornos tranquilos donde el docente no debe competir con el sonido.
Sin embargo, no todas las funciones cognitivas responden del mismo modo. Las habilidades visoespaciales —como interpretar gráficos, mapas o planos— parecen ser menos vulnerables al ruido, aunque un entorno sonoro equilibrado aumenta igualmente la percepción de confort y la participación en clase.
Para los docentes, el problema va más allá del esfuerzo vocal. El incremento del nivel de presión sonora en el aula se asocia a un aumento del pulso medio y a mayores niveles de estrés, lo que puede reducir la calidad de la comunicación pedagógica y afectar al bienestar general del profesorado. 2 H₂
Soluciones fonoabsorbentes para una educación de calidad
En este contexto, Saint-Gobain Ecophon propone una estrategia clara: integrar el acondicionamiento acústico como un elemento esencial del diseño arquitectónico de centros educativos. Las soluciones fonoabsorbentes instaladas en techos y paredes reducen la reverberación, mejoran la inteligibilidad del habla y crean entornos donde alumnos y profesores pueden comunicarse con eficacia.
La gama Ecophon Focus™, compuesta por techos absorbentes de clase A, se ha convertido en una referencia en escuelas y centros formativos gracias a su capacidad para equilibrar rendimiento acústico, diseño y sostenibilidad. Combinada con los paneles de pared Ecophon Akusto™, se logra una mejora significativa en la relación señal–ruido y en la claridad del mensaje, aspectos fundamentales para los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Un ejemplo destacado es la reciente renovación de la escuela infantil Männiku, en Tallin (Estonia). La instalación del sistema Ecophon Focus™ E en su pasillo principal transformó un edificio obsoleto en un espacio contemporáneo, eficiente y acústicamente equilibrado. El resultado: un entorno más luminoso, acogedor y silencioso que favorece la concentración y el bienestar de alumnos y personal educativo.
Este tipo de proyectos refuerza el compromiso de Saint-Gobain Ecophon con la innovación acústica y con la creación de espacios interiores más saludables, alineados con el propósito global del grupo: Making The World A Better Home. 2 H₂
